lunes, 2 de agosto de 2010

David en la Orilla

Sigo en Cádiz de vacaciones, ahora trado en la cama del hotel, echo de menos haberme traido algo de lectura. Ojeando la red, he encontrado algunos fragmentos de la que es una de mis novelas favoritas, “Kafka en la Orilla”, de Murakami. La novela trata sobre un joven que se ha fugado de su casa, ya que su padre, que aparte de ser un artista famoso, es alcoholico, le ha lanzado una profecia en plena borrachera: matarás a tu padre, y te acostaras con tu madre.

Como si de Edipo se tratara, en su viake, Kafka Tamura, que asi se llama el protagonista, se reecontrara con personas que le recoradan peligrosamente que creia olvidadas años atrás, y por las que sentira, además de un amor fraternal, un deseo propio de su despertar sexual…

Paralelamente, tenemos al entrañable Nakata, incapaz de comunicarse con las personas debido a un retraso mental pero que sí puede hablar con los gatos y que solo sabe que tiene una misión, que esta peligrosamente unida al destino de Kafka…


Tremendisima novela cargada de elementos esotericos, fantasmales, y muy, muy emotiva.


“ – Entonces, ¿Qué quiere usted de mí una vez que este yo de vuelta?

- Quiero una sola cosa – responde la señora Saeki. Alza los ojos, me mira de frente – Quiero que te acuerdes de mi. Si tú me recuerdas, no me importará que el resto del mundo me olvide.

El silencio se abate sobre nosotros. Un silencio profundo. Dentro de mi pecho crece una pregunta. Dentro de mi pecho crece una pregunta. Tan enorme, que me obstruye la garganta y me corta la respiración. Pero consigo tragármela. Le pregunto otra cosa:

- ¿Tan importantes son los recuerdos?

- Depende – dice ella. Cierra los ojos con desmayo. – a veces, no hay nada tan importante como los recuerdos.

- Pero usted ya ha quemado los suyos…



Apoyo las palmas de las manos en su espalda. Como si intentará descifrar un enigma. Su pelo acaricia mi mejilla. Sus brazos me abrazan con fuerza. Las puntas de sus dedos se me clavan en la espalda. Dedos que se aferran a una pared llamada tiempo. Huele a mar. Se oye el rumor de las olas rompiendo en la playa. Alguien me esta llamando. En la lejanía…

- ¿Es usted mi madre? – la pregunto al fin…”



Haruki Murakami “Kafka en la orilla”


Yo os dejo, que me voy a la playa… ¿qué encontrare en la Orilla?...

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