Critica de "Los Ojos de Julia": Entre el Thriller y el Giallo descarado.

Sara, una mujer ciega, fallece ahorcada en el sótano de su casa. Su hermana gemela, Julia, incapaz de asumir que está ha muerto, decide investigar los últimos días de su hermana. Lo malo, es que Julia tiene la misma enfermedad degenerativa que su hermana: quedarse ciega es cuestión de tiempo, y como siempre en estos casos, llegará en el peor momento…

Menudo menjunje de géneros que ha hecho el jóven Guillem Morales. Me encantó en su primer largo, El Habitante Incierto, donde ya se mostraban las pautas que veremos en Los Ojos de Julia. Lo malo que el ritmo es irregular, y si bien la primera media hora es bestial (con algunas escenas, como la de las ciegas en el vestuario, que son simplemente terroríficas), se sucede una segunda parte más orientada al drama personal de una Belén Rueda que se enfrenta al mismo destino que su hermana: la ceguera, y en la que todas las cartas del film están sobre la mesa y no hay mucho lugar para las sorpresas…

Afortunadamente, sus últimos 40 minutos se desenvuelven entre el Thriller más impactante y, sorprendentemente, el Giallo más descarado, con algunas escenas que recuerdan a esas películas de Dario Argento dónde sus protagonistas sufrían todo tipo de perrerías con objetos punzantes. Atentos al primer plano del cuchillo en el ojo o las agujas…

Tiene sus trampas, que acaban convirtiéndose en un divertido juego (en una buena parte de la película, nunca veremos la cara de algunos personajes) e incluso se permite algún efectismo final, de esos que siempre son bien recibidos.

Con todo, si bien la película no es tan terrorífica como debería, es bastante superior a El Orfanato, que no dejaba de ser una fotocopia de veinte películas de terror, y encima, tiene una producción mucho más modesta. Además, tanto Belén Rueda como Luis Homar estan tan geniales como siempre.

Y además, entretenida.